sábado, 7 de febrero de 2015

Las reglas del juego

Alejo lentamente mi boca de tus glúteos, con desgana, sólo el tiempo necesario para ver la leve marca de mis dientes y desear muy en el fondo que cuando vuelvas a casa tu marido la note.
Pero no, eso no ocurrirá. Él no suele fijarse en tu cuerpo como yo. Es por eso que estás aquí.
Mi lengua recorre lentamente tu espalda, sin prisas. Cuando llego a tu nuca ya estoy dentro de ti.
Te muerdes los labios, tu cuerpo se arquea levemente y mi mano aprovecha para apoderarse de tu pecho.
Suspiras y yo aumento la velocidad, nadie conoce tu ritmo como yo. Ya no es el fino ballet de unos minutos atrás, ahora es un salvaje rock de voces guturales y baterías vertiginosas. Tú gimes, la cama gime, mi brazo arranca la cabecera empotrada a la pared y busco en el borde de la cama un nuevo asidero para embestir con fuerza, como te gusta.
Tu grito y el mío se funden en uno solo, el chirriar de la cama de la habitación de al lado se detiene. Nuestro final épico ha captado la atención de los otros inquilinos ocasionales del motel.
Me desplomo sobre tu cuerpo,  sin soltar tu pecho, sin salir de ti. Mis labios mordisquean tu oreja y entonces sin pensarlo disparo a quemarropa: Te amo.
Por un segundo me miras incrédula, esperando haber oído mal. Mis ojos te confirman que he violado las reglas del juego.
"Imbécil" me gritas mientras te vistes. "Todo era perfecto y la cagaste", ruges mientras me arrojas a la cara mi ropa interior. Mi boca esboza un débil intento de disculpa y trato de poner mi cara de tipo duro e indiferente pero no me sale.
Me pides que no vuelva a llamarte y para mi confusión, las lágrimas se te escapan mientras dando un portazo, también escapas tú.

12 comentarios:

  1. Supongo que el hecho de que te lo tomes así es todo un cumplido para un relato.
    Un abrazo.

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  2. Wow!! El principio... Erótico y magnífico!! Y esa comparación rockera... Sentida a mazoooo!! Esa puñetera frase "Ya no es el fino ballet de unos minutos atrás, ahora es un salvaje rock de voces guturales y baterías vertiginosas..." es todo salvajismo y épica morbosa!!
    En cuanto al final... Lo cierto es que te deja un tanto "plof" u.u Ella también se enamoró, pero... Tenía su vida... ¡Debería haberse arriesgado! ;)
    ¡Besis! ^^

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    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    2. Se nota que te gusta el Rock... Que te voy a decir yo... Que soy una enamorada de Metal!! ^^ Te leía en mi cabeza, se han juntado un puñado de rifts de guitarra, la voz de Zakk Wylde y el ritmo de In Flames... Esa ha sido mi combinación, aunque no sé por qué muy bien!! ;P
      Wow!! El Señor Martin es uno de los Grandes en cuanto a finales que te dejan sin hablan!! ^^
      Besines!! ;)

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    3. Me encanta Zakk Wylde. Yo soy más de heavy metal clásico (maiden, priest, sabbath) y hard rock. Pero en general me fascina todo el rock, hasta el punk.

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  3. Sí es tremendamente erótico, Jhon! Además es una gran historia. Me encanta porque ese "Te amo" es para otras ocasiones. Estoy con la chica. Buenísimo, un abrazo

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    1. Es que como decía la carátula de una colección de baladas heavy que tenía:

      "Cuando los tipos duros se ponen blandos es porque sus partes blandas se ponen duras".

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  4. Hay "juegos" con reglas y saltárselas puede tener un alto precio. Qué pena, tantas mujeres suspirando porque alguien les diga alguna vez en su vida esas dos palabras y a la protagonista, sin embargo, le queman como ácido. Así es la vida, supongo...

    Estupendo relato, me ha encantado!! Un saludo.

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    1. Gracias Julia. Muy buena reflexión sobre el relato.
      Saludetes.

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  5. Wauuuuuu, qué relato, Jhon. Voluptuoso, sensual, vertiginoso y con ese final tan rotundo.

    Coincido con Campanilla feroz en el acierto del uso de las comparativas musicales. Me ha gustado mucho.

    Un abrazo

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    1. Hola Mari Carmen. Gracias por visitar. Eso del erotismo es una asignatura pendiente en mis relatos. A ver si me animo a explorarlo más.
      Un abrazo.

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  6. Buenísimo. Qué complicado es el amor. Un saludo.

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